Obras y reformas de zonas comunes: qué debes saber
Las obras y reformas en las zonas comunes son necesarias con el paso del tiempo, sobre todo pensando en el mantenimiento del edificio.
Por ello, si quieres conocer las obligaciones y derechos de los propietarios, a continuación te contamos todo lo que debes saber, para evitar llevarte sustos de última hora.
Reformas y obras en las zonas comunes
En primer lugar, antes de hacer una reforma de inmuebles, se entiende como elementos comunes los que comparten los distintos propietarios de un edificio. Es decir, el portal, la escalera, el ascensor, la fachada, la azotea, las instalaciones, el jardín, la piscina, etc.
Pero, ¿qué dicen los estatutos sobre su regulación? En el caso de los Estatutos de Comunidad, la regulación en cuanto a las obras asociadas a los elementos comunes se puede pedir en el Registro de la Propiedad.
En el caso de la Ley de Propiedad Horizontal, se establecen distintas obligaciones para los propietarios:
- Consentir las reparaciones y obras del edificio: es fundamental que cada propietario dé su permiso para proceder a las obras comunes. Por ejemplo, una tubería rota que pasa por distintos edificios.
- Permitir la entrada en el piso: en lo referente a obras o reparaciones podría ser necesario que deje entrar a su piso para proceder a la reparación.
- Contribuir con los gastos: lo que se conoce como los gastos mensuales de la comunidad de vecinos o también contribuir cuando hay derramas, es otra de las obligaciones que adoptan los propietarios.
- Respetar las instalaciones generales de la comunidad de vecinos y los elementos comunes: es fundamental utilizar todo con cuidado, con respeto, evitando los daños y desperfectos. Es algo que es de todos.
Otro dato importante que debes saber, es que para aprobar las obras y reformas en zonas comunes, no es necesario el acuerdo de la Junta de Propietarios. Si dichas obras son necesarias para el correcto mantenimiento del inmueble o bien si tienen que ver con la accesibilidad de los propietarios.
No obstante, en casos concretos la propia Comunidad de vecinos puede establecer sus propias regulaciones especiales, sobre todo en lo que respecta a las limitaciones de horarios.
Y en el caso de que sean obras específicas en el interior de tu vivienda, intenta avisar a los vecinos de cuándo se van a producir y los horarios. Incluso puedes preguntarles si no les importa.
Si tienes alguna duda, lo mejor es que te dejes asesorar por profesionales. Pero esperamos que al menos puedas hacerte una idea de cómo son las cosas en tu edificio. Normalmente, no es complicado ponerse de acuerdo con los vecinos.
Uno de los elementos más importantes de las zonas comunes son las escaleras, no te pierdas la información que te mostramos a continuación porque te traemos una guía donde te contamos paso a paso cómo elegir una escalera para tu vivienda.
Tipos de escaleras para viviendas
Cuando hablamos de tipos de escaleras para viviendas, tenemos muchas opciones diferentes para instalar. Claro que, antes de dar el paso, es importante conocer bien las características y puntos fuertes de cada una para acertar.
Y es que, las escaleras en una vivienda no es un tipo de reforma que hagamos todos los días. Es una obra que requiere de su tiempo, porque no es precisamente económica y por ello debes pararte bien a conocer los tipos de escaleras para viviendas que hay disponible.
Pero, ¿cuáles? Estas son algunas de las principales escaleras:
- Simples: las escaleras simples son sencillas y resultan ideales para aprovechar bien el espacio. Dejan un hueco debajo que se puede utilizar para almacenaje o para dejar un rincón acogedor. Son fáciles de diseñar y prácticas. Sencillas y más que suficiente si se busca gastar poco.
- Varios tramos: las escaleras en varios tramos son muy interesantes para aprovechar mejor cada hueco que hay libre. Para ello, se pueden hacer en forma de L o en forma de U, para abarcar los distintos tramos.
- Caracol: las escaleras de caracol son compactas. Es un diseño clásico que nos transporta hacia las películas antiguas y resultan cómodas para las viviendas que tienen poco espacio, dado que permiten acceder a partes superiores de la casa y cumplen con su función.
- Flotantes: con las escaleras de tipo flotante se pueden crear espacios más abiertos y aprovechar mejor la luz natural. Resultan una apuesta sencilla a la vez de original, por lo que también son muy recurridas.
- Compensadas: otro de los tipos de escaleras que tienes que conocer, son las compensadas. Es una forma de aprovechar los espacios con distribución irregular en una vivienda, puesto que mezclan una escalera rectangular con una de caracol. También es otra opción que puedes considerar.
Estos son algunos de los tipos de escaleras más habituales. Por lo que, dependiendo del estilo de tu vivienda o de cómo esté organizada en cuanto al espacio te podría interesar más una u otra. Es muy importante planificar este tipo de reforma de la vivienda ya que no sólo afecta a lo que estética se refiere, sino también a la funcionalidad de la misma.
Una escalera de difícil acceso, estrecha o que ocupa más espacio de lo necesario, puede cambiar completamente la experiencia. Por eso recomendamos siempre asesorarse al respecto.
¿Mi zona es comunitaria o privada?
Una de las preguntas más comunes que los propietarios deben hacerse es en qué tipo de zona van a hacer su reforma, ¿realmente se trata de un ambiente comunitario? ¿O es uno privado y no necesitas tantos permisos? Es hora de que conozcamos qué propiedades son de cada tipo:
Privadas
- Pisos, habitaciones y salas.
- Plazas de parking.
- Pequeños jardines.
- Balcones y terrazas pequeñas.
- Cualquier elemento que únicamente pueda ser aprovechado solo por los habitantes de esa vivienda.
Comunes o comunitarias
- Terrazas comunes.
- Pisos locales.
- Trasteros y espacios que comparten pared con otras propiedades.
- Plazas de garaje.
- Terrazas amplias.
Es decir, que las zonas privadas son los espacios que le conciernen únicamente a los dueños de la vivienda, mientras que las zonas comunes son aquellas que deben compartir con otros propietarios que tengan acciones dentro de un mismo espacio.
Estas reformas en zonas comunes deben ser consultadas con todos esos miembros, ya que, en términos prácticos, también son los dueños de la misma.
¿Cuáles son los tipos de obras frecuentes en zonas comunes de edificios?
Una vez entiendes la diferencia entre zonas privadas y comunes, es bueno saber cuáles son los distintos tipos de obras que puedes realizar. De esta manera, sabrás cómo proceder cuando vayas a realizar una reforma.
Emergentes
Figuran dentro de la Ley de Propiedad Horizontal como una obra totalmente urgente para mantener la seguridad y estabilidad de un edificio. En este sentido, si no se procede con la realización de los cambios en la estructura, es posible que se produzcan daños incluso mayores y que representen problemas para las personas y los edificios cercanos.
Estas son obligatorias, que no requieren tantos permisos como las obras necesarias, para que los trámites se realicen rápidamente y se proceda lo antes posible con la ejecución.
Necesarias
Con el único fin de mejorar la habitabilidad, protección y estructura de un edificio o ambiente en común, surgen las obras necesarias, que se consideran importantes, pero no son urgentes.
En este sentido, la Ley de Propiedad Horizontal contempla tres tipos específicos de obras que se consideran “necesarias”:
- Para realizar trabajos de mantenimiento que implican la conservación del edificio y las estructuras, reduciendo las posibilidades de daños futuros.
- Reparación o regeneración, para modificar la estructura, fortalecerla y generar un apoyo para reducir la posibilidad de daños futuros.
- Concernientes a la accesibilidad, que incluyen la eliminación de todo tipo de barreras, muros u obstáculos arquitectónicos para poder crear rampas, escaleras, ascensores y todo tipo de elementos que colaboren con el libre tránsito dentro de las instalaciones.
De mejora
Estas obras no son consideradas necesarias, sino que se toman como una opción dentro de la comunidad que tiene el fin de mejorar su aspecto o condiciones. No tiene que ver con la habitabilidad ni con la seguridad, sino que ofrece una especie de disfrute para todos o algunos de los miembros del espacio.
En este sentido, es de las obras que más permisos requieren, ya que se deben realizar presupuestos adicionales, acuerdos económicos y necesitan la aprobación de más de la mitad de los propietarios.
¿Necesito licencia de obra en comunidades de propietarios?
La licencia de obra es una autorización absolutamente necesaria para poder realizar determinadas obras dentro de un edificio. En este sentido, el permiso es ofrecido por la municipalidad, y en ella se incluyen las obras específicas que se van a realizar, así como cuenta con una vigencia temporal.
Casi todas las obras comunales requieren permisos, únicamente quedarán excluidas cuando desees pintar, soldar, modificar tuberías e instalaciones de electricidad, saneamiento, agua, calefacción y cuando se trate de cambios dentro de las viviendas de los propietarios.
¿Qué reformas frecuentes cuentan cómo comunitarias?
En líneas generales, hay una gran cantidad de obras que cuentan como comunitarias. Sin embargo, las más comunes son:
- Apertura de espacios e instalación de ascensores.
- Instalación de rampas para ampliar la accesibilidad al edificio.
- Mantenimiento, corrección y mejora de balcones para evitar que se desprendan.
- Mantenimiento de fachadas, reconstrucción y cambios sustanciales en la estructura.
- Cambios, roturas y modificaciones en los bajantes.
- Retiro, cambios y roturas en los portales de las áreas comunes.
Aunque hay muchas otras obras que se pueden hacer en los espacios comunes de un edificio, estas son las más frecuentes y requieren una serie de permisos, pero que ofrecen beneficios a todas las personas de la comunidad.
Esperamos que estos consejos os hayan sido útiles a la hora de tenerlos en cuenta si estás pensando en realizar una obra así.
Buenas tardes. En nuestra comunidad se está planteando la colocación de paneles fotovoltaicos en la cubierta plana no transitable protegida con graba. No se va a anclar nada a la cubierta ya que la instalación será mediante soportacion de.hormigon que,requiere la retirada de.al menos la mitad de la grava existente. Por lo tanto, se estaría alterando la primera capa aislante frente a la temperatura. El libro del edificio da unos datos que no concuerdan con el informe que ha hecho el arquitecto elegido y que, además, deja claro que el.sobrepeso que se someterá a la cubierta no sería soportado sin la retirada de cierta cantidad de grava.
Al tratarse de una obra de supuesta mejora energética, el edificio ya posee paneles de origen(tiene 2 años el edificio) no sabemos si necesita 1/3 y la mitad más uno para.ovtener su aprobación.
Hemos contactado con la promotora y además de perder la garantía estructural al alterar la cubierta, se podría perder la cobertura de un seguro adicional de estructura que se tiene contratado.
Mi consulta es si hay posibilidad de parar la obra.
Gracias